El “enigma” de la corrupción en Monómeros

Monómero es una empresa colombo-venezolana con sede en Barranquilla Colombia, productora de agroquímicos filial de Pequiven, administrada por el gobierno interino (al que reconoce la República de Colombia), cuyo responsable en la conducción de la empresa y su gestión administrativa es la Asamblea Nacional de 2015, a través de su presidente Juan Guaidó, está bajo fuego cruzado por manejos opacos y denuncias de corrupción.

Apenas seis meses después de que el gobierno interino nombrara a la nueva junta directiva de la empresa; Humberto Calderón Berti, embajador de Guaidó en Colombia, denunció malos manejos de esta, debido a que “los partidos metieron la mano”.

Luego de los señalamientos de Calderón Berti empezaron a aparecer denuncias en los medios sobre malos manejos y corruptelas en Monómeros y algunos políticos vieron la oportunidad de sumarse, explotar el caso y exigir investigaciones.

El cuestionamiento del manejo de los directivos encargados de la rentabilidad de Monómeros desató una lucha de declaraciones públicas entre factores de oposición, en las que se denunciaron presunciones de corrupción, que hoy aún se mantienen y afectan el patrimonio nacional.

Sin duda el gobierno colombiano percibió esta polémica inconveniente para su seguridad en el suministro de fertilizantes de manera que Monómeros fue intervenida por un organismo oficial colombiano.

Si bien la Asamblea Nacional de 2015, a través de la Comisión Delegada, acordó en noviembre del año pasado una serie de medidas para recuperar a la empresa y llevar adelante medidas para su saneamiento, estas no se han llevado adelante.

Hasta ahora ni la Comisión Delegada ni la Comisión de Contraloría de la AN-2015 han explicado porque no se ha hecho ni siquiera la auditoría externa ordenada.

Pero la situación de Monómeros se agrava porque fue sometida a un proceso de toma hostil, de la que tuvo conocimiento la comisión de la AN-2015 que viajó a Colombia. Esa comisión presume que hubo participación de actores políticos venezolanos, en lo que caracterizaron como una “conspiración” para apoderarse de Monómeros. Desde entonces, no se sabe nada más del tema.

En declaraciones públicas el diputado de la AN-2015, José Luis Pirela, señaló que presentó una acusación ante la Fiscalía de Colombia -25 de mayo de 2022- en contra del gerente general y la directiva de Monómeros, a quienes denuncia de haber cometido delitos de hurto, corrupción, lavado de activos, entre otros.

La opinión pública venezolana ha reaccionado frente a este caso coincidiendo, en que los políticos deben estar lejos de la conducción de las empresas y se ha hecho sensible a la transparencia y manejo honrado de los asuntos públicos, dando paso para un nuevo ciudadano sin miedo a exigir transparencia y también a practicarla.