Venezuela necesita de una estrategia política y jurídica para solucionar, al menos, la carencia de cuatro de los derechos básicos de toda persona: el alimento, la salud, la educación, y el transporte.
Los ciudadanos hemos entendido que exigir las garantías de los derechos que nos otorga la Constitución, es la clave para salir del usurpador.
El 15 de marzo de 2022 el oficialismo declaró que el salario básico sería de Bs. 130 equivalente a $29,95; en noviembre se mantuvo en Bs. 130, y su equivalente cayó $13,31, y hoy $ 6,9.
¿Cómo se hace para sobrevivir y cubrir las necesidades básicas?
La protesta de docentes luego de las vacaciones decembrinas es respuesta a los bajos salarios del sector educativo y la falta de condiciones para el regreso a clases. El Colegio de Profesores, el Magisterio, el Colegio de Licenciados y otros gremios respaldan la protesta por el derecho a un salario justo. Además, se unieron a las marchas los pensionados y jubilados quienes devengan los $6,91 mensuales.
Otro de los motivos que impulsó la marcha de los profesores es la deserción docente la cual llegaría a 60% para enero de 2023, según información de distintos gremios de educadores venezolanos; ello sin considerar que les toca ayudar a los alumnos que están en situación similar además de buscar apoyo para pintar los salones y hasta reconstruir las sedes educativas.
La protesta de los docentes, gremios de educadores y personal de la salud por un mejor salario y seguridad social, se realiza bajo la consigna “CON HAMBRE Y MISERIA NO HAY EDUCACIÓN, NI SALUD”.
El paro se realizó en 18 estados y coincidió con el inicio de clases. Los gritos que se oyeron: «Policía, escucha, esta es también tu lucha»; «Ministra, escucha, queremos tu renuncia», “La clase de hoy la damos en la calle”.
Gricelda Sánchez, Coordinadora de la Coalición Sindical Nacional de Educación, afirma que “es imposible que podamos dar clases, cuando no podemos pagar el pasaje».
Por su parte, Nicolás Maduro sólo saludó el inicio del año escolar y en su cuenta twitter desea feliz retorno a las actividades escolares y laborales; evitó referirse a las manifestaciones que los docentes, administrativos y jubilados anunciaban ya concentraciones para el 9 de enero de 2023 exigiendo salarios dignos para seguir educando.